Las carrilleras al vino son un plato sofisticado y reconfortante que destaca en la gastronomía española por su sabor intenso y su textura tierna y jugosa. Este guiso, elaborado con carrilleras de cerdo o ternera cocinadas lentamente en una rica salsa de vino tinto, es un ejemplo perfecto de cómo la paciencia y los ingredientes de calidad pueden transformar una comida en una experiencia memorable. Lo fascinante de las carrilleras al vino es su meticuloso proceso de cocción, que permite que la carne alcance una ternura sublime
Las carrilleras, un corte de carne de la mejilla del animal, son conocidas por su abundancia en tejido conectivo. Al cocinarse a fuego lento durante varias horas, este tejido se descompone, dando lugar a una carne que prácticamente se deshace en la boca. La salsa, hecha con vino tinto, caldo, verduras y especias, se reduce y espesa, envolviendo la carne en una capa de sabores profundos y complejos.
Otra característica distintiva de las carrilleras al vino es su versatilidad en cuanto a acompañamientos. Este guiso se puede servir con una variedad de guarniciones que complementan su rico sabor. Desde puré de patatas cremoso hasta verduras asadas, pasando por arroz o pasta fresca, las opciones son numerosas y permiten personalizar el plato según las preferencias y la ocasión.
La textura de las carrilleras es probablemente el carácter más distintivo de esta receta. Respetando los tiempos, queda exactamente en su punto. Además, la propia cocción de la carne crea una salsa con cuerpo e increíblemente potente, que se puede comer casi con cuchara. Compra pan que lo vas a necesitar pero bien.
Comenzaremos salpimentando las carrilleras y pasándolas ligeramente por harina. En una sartén calentamos 5 cucharadas de aceite y las sellamos.
Retiramos las carrilleras y añadimos la cebolla, los dos dientes de ajo, el puerro, 2 zanahorias y pochamos bien.
Añadimos un vaso de vino y lo dejamos 3 minutos a fuego fuerte. Agregamos el tomillo y agua hasta cubrir.
Cerrar la olla exprés y, cuando salga el vapor, contar 10-15 minutos.
Abrir, probar la textura de las carrilleras, sacarlas y triturar la salsa. Añadir las dos zanahorias restantes a rodajas finas y devolver las carrilleras a la salsa.
Dejar cocer unos 10-15 minutos más con la olla abierta removiendo de vez en cuando para que no se peguen.